Parecía que la perra, de nombre Bella, estaba infestada de garrapatas chupadoras de sangre. Estaba llena sobre todo en las orejas y oídos. El veterinario no podía eliminarlas todas de una vez ya que Bella hubiera perdido mucha sangre.
Sabiendo que a Bella le llevaría tiempo curarse, el equipo de CLAW supo lo que tenía que hacer. Tomaron a Bella bajo su cuidado y se aseguraron de darle toda la comida y el amor que necesitaba.
Luego, solo unos días después, sucedió algo increíble …
Las garrapatas de Bella desaparecieron y el equipo de CLAW pudo lavarla.
Día tras día, Bella mejoró su aspecto y su hermoso pelaje negro volvió a brillar.
Unas semanas más tarde, Bella fue adoptada, y ahora está recibiendo todo el amor y la atención que se merece.
¡Estoy encantada de que Bella haya encontrado finalmente un hogar que le de cariño!
Se me saltan las lágrimas de alegría pensando que ahora Bella puede correr y jugar cuanto quiera –sin necesidad de preocuparse por encontrar algo que comer.
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