Latana corrió a la planta de arriba pero Sasha se le había adelantado y tiraba ya del pañal de la bebé, para sacarla del peligro.
La madre se hizo entonces cargo de la situación y ahora están todos a salvo. Latana contó en una entrevista que si no no hubiese sido por Sasha y su aviso quizá la familia hubiese acabado devorada por las llamas.
Sasha sigue formando parte de la vida de la niña y tienen una relación muy especial.
Lamentablemente muchos siguen pensando que los pitbulls son solo perros de pelea y agresivos por naturaleza. Esta historia muestra cómo los pitbulls son maravillosos perros de familia, todo depende de cómo los dueños los eduquen.
¡Comparte para dar las gracias a Sasha por su increíble actuación!