Fue entonces que Bruce vio una vieja mesa, y debajo de esta mesa habían muchas otras cosas. Él se acercó y vio varios bates de béisbol debajo de la mesa.
Y había un bate en especial que captó su atención.
Él tomo uno de los bates que era un poco más delgado. Lo compró por solo 1 dólar y directamente entendió que este bate tenía bastante potencial.
Parecía como si había sido utilizado por muchos jóvenes – y tal vez ellos lo habían utilizando imaginándose que eran el icono de béisbol Babe Ruth. ¿O tal vez Jackie Robinson?
Él fue el primer jugador afroamericano en la liga de béisbol de la Major League Baseball en Estados Unidos y entre otras jugó seis finales importantes de la Serie Mundial y finalmente terminó en el salón de la Hall of Fame de béisbol – quizás la prueba definitiva de que uno es un legendario de este deporte.
¡No pasó mucho tiempo antes de que Bruce comenzara a sospechar que el verdadero Jackie Robinson había sido el dueño de este bate!
Porque el reconoció el único «agarre» del bate , escribe KCCI News 8.
¡Fue así que lo reconoció! Pero como Bruce es un hombre muy honesto él no se podía quedar sin hacer nada, sabiendo que lo había comprado tan barato de esta mujer. Así que él regresó donde la mujer y le trató de explicar lo que ella le había tratado de vender tan barato. Luego él le dijo que tomara un lápiz – y le contó que había un sitio en el bate donde Jackie tenía su nombre grabado.
Y frotó el lápiz sobre la madera – y de repente vieron el nombre de Jackie en el bate.
Sue estaba muy sorprendida, ella no podía entender cómo había resultado en su garaje, al mismo tiempo no estaba sorprendida. Porque la historia tiene una explicación.
– Mi tío Joe Hatten jugó para Brooklyn Dodgers. Lo llamaban «Lefty Joe» y jugaba bésibol en los años 40 con él (Jackie), le dice al canal de televisión.
A Bruce le pareció muy emocionante escuchar esta historia y la conexión que había entre Sue, su familia y el legendario jugador Jackie Robinson!
Qué lindo que Bruce le contó esto a la mujer. Muy bien, me parece a mi. ¡Comparte esta linda historia con tus seres queridos!