Algunos años antes la familia había estado de vacaciones en Orlando, Estados Unidos con el hijo Jake, de 2,5 años. Él se salió por una puerta trasera y se cayó en una corriente de agua. Jake se ahogó.
«Yo lucho pensando en que mi hijo se cayó al agua sin saber lo que tenía que hacer. Y ese pensamiento y esa visión hace que quiera que otros niños, no solamente los míos, estén seguros y puedan hacer esto en el agua», le cuenta Keri a Fox News.
En una situación de vida y muerte es importante mantener la calma y respirar. Cuando Julia solo tenía 13 meses empezó a entrenar para poder manejar este tipo de situaciones para mantener la calma y poder flotar si se cae al agua.
Practicar
Ashleigh Bullivant de Infant Swimming Resource explica que pequeños niños a través de ejercicios de respiración pueden entrenar, para poder contener la respiración.
Loa niños pueden aprender a nadar en 4 semanas, con solo 10 minutos de práctica cada día.
«Para mí se trata de protegerla, eso es lo que una madre debe hacer», dice Keri.
«Yo siento que traicioné a mi hijo y no voy a fracasar con mis hijas.»
Pensando en la cantidad de niños que mueren ahogados siempre tenemos que luchar para que la mayoría de los niños aprendan a nadar desde pequeños.
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