Bild informa de que el lunes por la noche un agente de policía salvó a un niño de 2 años del interior de un auto a elevada temperatura, después de recibir una llamada de aviso de unos transeúntes que pasaba por el lugar, en un parking de la ciudad alemana de Rheda Wiedenbrück.
El pequeño estaba sudando y lloraba desesperado en el interior del auto.
Según la Universidad de Georgia, la temperatura en el interior de un vehículo puede llegar a los 56 grados centígrados cuando en el exterior hay entre 30 y 40 grados.
Durante 30 minutos, el niño estuvo llorando dentro del vehículo, hasta que unos policías llegaron en su ayuda. Los agentes rompieron una de las ventanillas y por ahí sacaron al pequeño.
Diez minutos después, la madre del niño, de 22 años, volvía de un festival. «Estábamos buscando a otra amiga y llevó más tiempo de lo que pensamos», dijo la joven madre a Bild.
Los policías la interrogaron y acabaron acusandola de abuso de menores. Además, se notificó lo ocurrido a la organización estatal de bienestar infantil del país en el que ocurrió, Alemania.
No se puede dejar a niños solos dentro de un vehículo, especialmente sin hace tanto calor y son tan pequeño como era este. El niño tuvo suerte de que unos paseantes se dieran cuenta de lo que estaba ocurriendo e hicieran la llamada de urgencia.
Esperamos que se recupere del shock lo antes posible y que ningún otro niño tenga que pasar por esto.
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