Cuando Adele llega al estribillo, pide al público que la ayude, algo que hacen sin saltarse una palabra. Y desde el segundo en que Adele ve el amor con el que el público trata a esta poderosa canción, su actuación se vuelve mágica.
No hay duda de que esta canción significa tanto para Adela como para la audiencia. Juzga por ti mismo aquí abajo:
¡Esto me llegó al corazón! ?