El mecánico de autos Benny Rodriguez, es un hombre de 31 años que siempre toma el mismo camino para ir al trabajo. Benny tiene su propia empresa Swift Tire Shop, donde arregla y repara autos.
Pero el martes, sin motivo ninguno, tomó un camino diferente al dirigirse al trabajo. Una intuición posiblemente – y la decisión tendría un gran impacto en las vidas de otros.
Benny Rodriguez, nacido en México – iba sentado cantando canciones country cuando de repente vi un automóvil en el río que corría al lado de la carretera.
Había llovido muchísimo, con tormentas eléctricas.
Benny salió del auto y escuchó que alguien pedía ayuda. Benny creyó oír la voz de una mujer desesperada que salía del auto, a punto de hundirse en el río.
Al acercase, Benny escuchó como la mujer gritaba que tenía a su hija de 2 años dentro atrapada en el auto.
La madre había conseguido salir del automóvil – pero la corriente de agua estaba metiéndose en el asiento del pasajero donde estaba su hija sentada.
”Le pregunté si se encontraba bien. Me dijo que sí y contestó: ‘Pero mi hija de 2 años está atrapada en el auto», cuenta Rodriguez, que está casado y tiene dos hijas de 7 y 10 años.
Benny comprendió enseguida que no había tiempo para llamar a pedir ayuda. Y decidió salvar a la mujer y a su hija.
”Corrí a mi camioneta y tomé una cuerda. Me la até y después me tiré al agua.» explica a Denton Chronicle
Ató la cuerda a un árbol y luego se tiró al agua, mientras que otro automovilista llamaba a la policía.
Con su brazo izquierdo consiguió sacar a la niña por la ventana. Se había sentado en el asiento del pasajero y la ventana estaba lo suficientemente inclinada para permitir que Bobby la rescatara.
«Cuando me dijo que su niña pequeña necesitaba ayuda, pensé en mis propias hijas».
30 minutos después de la hazaña de Benny, los primeros bomberos llegaron al lugar del accidente. El jefe de bomberos Luke Ridinger dijo que la madre y la hija solo habían sufrido heridas leves y las llevaron al hospital.
Pero si Benny no hubiera pasado con la camioneta por ahí, se hubiera producido una catástrofe.
”El caudal del río estaba muy alto. Atrapadas en el auto ambas dos hubieran muerto» explica Luke Ridinger.
Según Ridinger la mujer había perdido el control del auto con la lluvia. Al menos un persona había muerto ya en un accidente de tráfico ocasionado por las lluvias torrenciales.
Lágrimas de gratitud
Tras el accidente, llegó el marido de la mujer a buscar a la madre y a la hija. Benny nunca le había preguntado su nombre – ya que se vio obligado a actuar rápidamente.
Solo recuerda las lágrimas de aprecio que corrían por las mejillas de la mujer.
”Lloraba, me daba las gracias y daba las gracias a Dios por la ayuda que le había enviado» cuenta Benny.
Puede que Benny no se parezca a todos los superhéroes que vemos en películas, pero este maravilloso mecánico mostró humanidad y actuó cuando más se necesitaba.
El mundo necesita más héroes cotidianos como Benny. Por favor, comparte esta historia en Facebook para rendirle homenaje.