Este trágico suceso supuso que sus padres perdieran la custodia de Charlotte y su hermano. Los dos hermanos comenzaron una nueva vida con unos parientes, Sharon y Tim Ponce.
Se deprimió
Y por culpa de este terrible suceso, la vida de Charlotte no era fácil. Estaba tan desfigurada que le era muy difícil acudir a acontecimientos sociales. Y además solía estar muy deprimida.
Pero a pesar de tener un terrible comienzo en su vida y someterse continuamente a operaciones para reconstruir su cara, Charlotte no se quejaba nunca, informa Daily Mail.
Durante cinco años el médico Koongkirt Chaiyaste estuvo presente ayudándola. Y once años después del ataque que ocurrió en el 2003, tuvo que prepararse para la mayor prueba hasta ahora acometida.
Alegría – 11 años después
Llegó el momento de la gran operación. El tejido de cartilaginoso de las costillas de Charlotte se iba a implantar en su brazo. Y allí la nueva oreja de Charlotte iba a crecer, con la intención de reemplazar a aquella que fue devorada por el mapache.
El año pasado ocurrió algo fantástico.
Hoy Charlotte tiene 15 años y durante tiempo había estado guardando unos pendientes. ¡Y después de la exitosa operación pudo ponérselos por primera vez!
Gracias a los expertos médicos, Charlotte pudo sentirse finalmente como sus amigas y otros niños.
Quiere ayudar a otros
Como mencionamos anteriormente, Charlotte era muy positiva a pesar de lo ocurrido cuando apenas era un bebé.
Pero lo más fantástico de todo es que ella de mayor quiere ser ingeniero biomédico. ¿Y por qué? Porque desea ayudar a las personas que se han quedado sin alguna parte de su cuerpo.