A la hora de diseñar nuestro jardín hay pocas plantas tan agradecidas como las suculentas, porque son hermosas y además muy fáciles de mantener porque no necesitan tanta agua como otras plantas.
Pero hay una especie de suculenta que destaca por tener una forma peculiar: parece una rosa que nunca se marchita.
Su nombre científico es Greenovia dodrentalis y es endémica de las islas Canarias. La disposición de sus hojas curvas hace que formen estructuras parecidas a la flor de un rosal.
Esta hermosa planta vive en terrenos volcánicas y lamentablemente no es fácil de conseguir, su recolección incontrolada la está poniendo al borde de la extinción.
Cómo cuidar una Greenovia dodrentalis
Esta planta adora el sol, aunque hasta cierto punto ya que demasiado calor en ambientes secos puede dañarla.
No crece mucho, apenas 15 cm y sus hojas verdes pueden llegar a tener matices rosa en sus bordes, sobre todo en los pétalos más viejos.
Si logran hacerse con semillas de esta hermosa planta y la hacen crecer pónganla en un lugar cálido y con mucha luz, pero eviten exponerla a mucho calor en las horas pico del día.
En cuanto al frío, hay que tener en cuenta que esta planta no soporta temperaturas inferiores a 0ºC. Asegúrense además de que la tierra que usen para plantarla drene bien.
En cuanto al riego, esta es la mejor parte. En invierno sólo necesita que la rieguen entre una y dos veces al mes. Mientras que en verano quizás unas dos veces por semana en los meses más calurosos. ¡No se pasen porque pueden aparecer los temidos hongos y entonces adiós planta!
Por favor, comparte si también te fascinaron las Grenovia dodrentalis y su maravillosa forma de rosa.