Desde hace cuatro años Sophia Lopez ha trabajado como conserje en un hospital en los Angeles, California, Estados Unidos.
Cuando comenzó la pandemia del coroanvirus y todos los hospitales del país se vieron fuertemente afectados ella hubiera querido tener la economía para quedarse en casa, pero ella es madre soltera, tiene dos hijas pequeñas, y no no tuvo otra opción de trabajar en primera fila del contagio.
Un día normal en el trabajo, Sophia limpia tanto como los baños de los pacientes y del personal, sale con la basura y limpia los suelos. Ella nunca sabe quién ha entrado antes, o cómo las personas manejan su higiene. A pesar de esto Sophia y sus colegas no son equipadas con ningún equipo de protección.
«Yo me voy del trabajo en mi ropa de conserje, y en el auto me cambio a mi ropa normal», le contó Sophia CBS News.
«Luego inmediatamente cuando llego a la casa entro a la duscha y pongo mi ropa de trabajo y mi ropa normal para lavarlo todo, porque no quiero llevar nada dentro de la casa», le cuenta Sophia a CBS News.
Sophia es una de muchas personas que trabaja en el mundo sanitario, en primera fila. Pero a pesar de esto no le dan protección.
«Nos exponemos a un riesgo. Especialmente como no sabemos si los cuartos tienen covid o no», dice Sophia.
Todos los que trabajan en alto riesgo deberían obtener equipo de protección. Coparte si estás de acuerdo.