Perder a sus seres queridos tiene que ser de lo más horrible que uno puede pasar. Los padres no deben sobrevivir a sus hijos, especialmente si los hijos son muy pequeños.
La tristeza y la frustruación es algo con lo que uno tiene que vivir toda la vida.
Lindsey Schmidt, 29, y su marido Edward, de Estados Unidos, vivían una vida calmada en Beacher, Illinois, con sus tres hijos de 6, 4 och 1 año. Y la familia se iba a volver aún más grande – iban a tener otro hijo y todos estaban muy felices y muy emocionados.
Cuando llegaron las vacaciones los padres inscribieron a los hijos a una escuela de verano, los niños estaban muy contentos. Lindsey los montó al auto y salieron. Pero después de un ratico todo paró.
Un auto no paró en una señal de stop y se chocó con el auto de la familia Schmidt. Caleb y el bebé que Lindsey tenía en el estómago murieron inmediatamente. Weston, Owen y Lindsey fueron trasladados al hospital pero nadie se recuperó. Los tres murieron tras el grave accidente, según Chicago Tribune. El que manejaba el otro auto, un hombre de 25 años, tuvo unas pocas lesiones, pero lo tuvieron que operar.
La fuerte colisión destrozó la vida de Edward. Cuando la policía luego reveló la verdad detrás el accidente Edward quedó completamente devastado.
Se cree queel conductor del otro auto no había visto la señal de stop – por haber estado mandando un mensaje de texto con el teléfono.
Edward ahora tenía que tratar de seguir adelante sabiendo que un mensaje de de texto fue lo que causó el brutal accidente.
Fue en esta vía que el horrible accidente ocurrió. Gente a dejado flores y peluches para recordar a la familia Schmidt.
Yo mismo he utilizado el móvil cuando he manejado varias veces, pero nunca más lo voy a hacer.
El hecho de que uno puede herir a otra persona por no poder esperar un momentico para mirar el teléfono me hace dar escalofrío.
Aquí puedes ver un vídeo con la noticia sobre el trágico accidente.
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Puede tener un fin mortal para ti, para los pasajeros y para los otros que están en las vías.
