Cuando un bebé llega a este mundo, el gran alivio de sus padres es comprobar que ha nacido bien y sin ningún problema de salud.
Lamentablemente, no siempre es así y hay niños que no lo tienen fácil, como esta hermosa niña llamada Paisley que nació con una lengua con un tamaño fuera de lo normal.
Paisley nació con un síndrome conocido como Beckwith-Wiedemann, una enfermedad genética que provoca un crecimiento dramático de alguna parte del cuerpo, en este caso de su lengua.
La enorme lengua de Paisley le impedía vivir con normalidad. Durante su primera semana de vida, tuvo que vivir conectada a un respirador artificial. Además le era imposible hacer cosas normales para un beber, como amamantarse o sonreír.
Según reportó the Mirror, la madre de Paisley no pudo ni dar el pecho a su pequeña, quien fue alimentada con una sonda.
Sus padres tuvieron que esperar hasta seis meses para que los médicos pudieran iniciar un doloroso tratamiento para salvar a la bebé.
Por suerte, lograron que un médico especialista no sólo aceptara operar a Paisley sino que estaba dispuesto a no cobrarles nada.
A pesar de todo, les dejaron claro que las posibilidades de que la bebé sobreviviera eran reducidas.
¡Pero la operación fue un éxito! Y parece que Paisley podrá tener una vida normal.
¡Sus padres por fin pudieron por fin disfrutar de su primera sonrisa!
Tan sólo 1 de 14.000 niños nacen con el síndrome de Beckwith-Wiedemann, y no todos logran superarlo y tener una vida en condiciones.
Es admirable cómo estos padres hicieron todo lo posible y contaron con una mano de ayuda para hacer realidad su sueño: tener una hija sana y ser una familia feliz.
¡Por favor, comparte con los demás esta hermosa historia con final feliz!¡Bonita como la sonrisa de Paisley!