Cuando Bob Degaro y su esposa supieron que estaban esperando un bebé, se pusieron muy contentos – pero también estaban preocupados. No tenía mucho dinero y se dieron cuenta de que no podrían ofrecerle a su hijo una vida segura.
Y se vieron obligados a tomar una decisión difícil: dar a su hijo en adopción.
La pareja posteriormente tuvo dos hijos estupendos a los que cuidaron y formaron parte de su familia, pero Bob siempre quiso saber cómo le había ido al hijo que se vieron obligados a dar en adopción años atrás.
Y ahora ya conoce la respuesta.
El chico se llama Nathan Boos. Ha crecido sabiendo que era adoptado desde que era un bebé. Pero sus padres adoptivos no le han contado mucho sobre sus padres biológicos.
A Nathan tampoco le ha interesado mucho saber sobre sus verdaderos padres, porque ha crecido en un hogar seguro y lleno de amor.
Cuando Nathan se hizo adulto consiguió un trabajo como conductor de camiones en una empresa de Wisconsin, EEUU. Era un trabajo que le motivaba y le gustaba. Se encontraba muy a gusto con sus compañeros.
Pero un día Nathan escuchó algo que le iba a cambiar la vida para siempre.
Cuando su madre se metió en Facebook se quedó helada al ver una cara conocida entre los amigos de Nathan. ¡Era Bob, el padre biológico de Nathan!
Parece ser que Nathan y Bob habían sido compañeros durante dos años. ¡Y si eso no era todo, los dos eran muy buenos amigos!
Pero ninguno de los dos sabían que eran padre e hijo.
Ni Nathan ni Bob hubieran podido creer en esa increíble coincidencia.
Pero sin embargo esto no supuso una razón para romper su amistad – ¡al contrario! Ahora se han acercado mucho más. Y lo mejor de todo: ¡Nathan podrá encontrarse con su padre biológico todos los días!
¡En el siguiente vídeo (en inglés) Nathan y Bob cuentan este asombroso pero fantástico encuentro!
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