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Elegir ser padre adoptivo es un acto que merece ser elogiado. Porque no solo supone ser padre y por lo tanto tomar la responsabilidad de cuidar a un niño y educarlo – sino que también es salir de su propia burbuja y darle a niño una nueva oportunidad en la vida.
En el año 2013 Joseph y Shanna Weight de Utah, EEUU, adoptaron a un niño llamado Milo. Su madre, una adolescente había contactado con la organización «Act of Love Adoptions» y ésta a su vez se había apuesto en contacto con Joseph y Shanna.
Cinco años más tarde se pusieron sin embargo en contacto con ellos. En esta ocasión, querían saber si la pareja estaba interesada en adoptar a una niña de la que esta adolescente estaba embarazada – era la hermana de Milo.
Otro bebé
Joseph explicó: «Nos contactaron y nos dijeron: Milo va a tener una hermana. Y nos preguntaron si podíamos considerar adoptar a la hermana».
«En aquel momento pensé que se trataba de algo muy grande».
Aunque su interés por adoptar permanecía vivo, la pareja tenía mucho que considerar. Ya eran padres de Milo y de su hijo biológico, Nash.
La pareja Weight mantenía el contacto regular con la madre de Milo. Solían escribirle una carta contándole cómo estaba su hijo y como iba creciendo y desarrollándose.
«Tenemos una buena relación con ella y siempre pensamos sobre ella de manera positiva. Había sido muy generosa al permitirnos ser los padres de su hijo» dijo Shanna.
No obstante los padres sentían que no estaban preparados para ser padres de nuevo, ni tampoco estaban preparados para la tarea. El pequeño Nash tenía solo 20 meses, y cuidar de un tercer hijo sin duda aumentaría la presión sobre la familia, tanto entonces como en el futuro.
Shanna sin embargo comenzó a tener la idea más clara: «Mi primer pensamiento fue: no podemos hacer esto. Si necesita venir a nuestra casa lo demás no tiene importancia. Va a funcionar seguro».
Estuvieron pensándolo una semana hasta que tomaron la decisión final y para ello les ayudó el pequeño Milo. En el momento que en supieron que su madre biológica estaba embarazada de nuevo, les dijo a sus padres que ellos debían traerse también a su hermana a casa.
Y cuando Onni Pearl, la hermana de MIlo, nació el 25 de febrero del 2019, dos días después los padres adoptivos se la llevaron a su nuevo hogar.
Onni adora su casa, a sus dos hermanos mayores, y a sus dos amorosos padres que deseaban darle lo mejor del mundo para comenzar su vida.
¡Qué maravillosa historia sobre el amor y la confianza. Estamos tan contentos de que tanto Milo como Onni puedan tener un hogar lleno de amor. Deseamos a la familia lo mejor para un futuro!
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