En ocasiones, cuando la vida nos obliga a enfrentarnos a situaciones muy duras lo que más nos reconforta es que completos desconocidos demuestren su solidaridad y nos echen una mano. Un pequeño gesto puede valer millones en la vida de alguien en momentos de dificultad.
Una familia de Texas, en Estados Unidos, está pasando por una de las prueba más duras que puede afrontar una familia: la pequeña Adelaide Stanley, de sólo 3 años fue diagnosticada de leucemia el día de su cumpleaños, escribe ABC.
Adelaide empezó el tratamiento de quimioterapia poco después, su cabello cayó y su sistema inmunológico, como el de muchos pacientes de cáncer, está débil, por lo que cualquier contacto con un virus o bacteria peligrosa puede ser fatal.
Los padres de Adelaide tratan de mantenerse lo más fuertes posibles ante su hija, pero no hace mucho una situación resultó a su padre, Jordon Stanley, especialmente desgarradora.
La familia iba en el auto cuando Adelaide vio por la ventana su restaurante favorito, J. Wilson’s, pero su padre, entristecido, le contestó que no podían y que tenían que esperar a que estuviera sana.
Con las bajas defensas de Adelaide, visitar un restaurante lleno de gente resulta enormemente riesgoso.
Su mamá, Vanlam Nguyen contó lo sucedido a una de sus amigas y luego pasó algo que nadie esperaba.
La amiga de Vanlam se puso en contacto con el restaurante y les contó la situación. Los dueños del local, conmovidos, decidieron entonces hacer algo al respecto: abrir antes de tiempo, a las 8:45 de la mañana, para que la familia pudiera comer como siempre.
Así fue como todos pudieron volver a disfrutar en familia en el restaurante el pasado 26 de febrero. Todos estaban felices de vivir un poco de normalidad en medio del drama que estaban viviendo y además por poder hacer feliz a la pequeña Adelaide.
La pequeña no podía contener su sonrisa de felicidad de estar probando sus platos favoritos como siempre había hecho, platos típicos americanos.
Desde aquí queremos aplaudir el esfuerzo de estos buenos corazones para dar una alegría a esta niña a la que le ha tocado afrontar una prueba muy dura demasiado pronto en la vida.
Deseamos que se pueda recuperar pronto y que estos terribles momentos puedan quedar atrás. Nuestras oraciones están con ella y su familia.
Por favor, comparte para elogiar el gesto de este restaurante que fue más allá para cumplir el deseo de la pequeña Adelaide.