Es incomprensible como un padre puede hacer daño a sus propios hijos.
Y por ello es tan difícil entender que esto pase en el mundo cada día.
Es imperdonable que la muerte de un niño ocurra de una manera tan brutal, matándolo. No hay ninguna excusa en el mundo que justifique un acto así.
El mundo se ha quedado en shock al enterarse que una madre acunaba a sus hijos para dormirlos antes de estrangularlos a los tres.
Los niños difunden amor y alegría allí donde estén. Su risa es como música celestial y si se tiene un mal día, solo hace falta mirar lo fantástico que son para sentirse queridos.
Con esto en mente, es difícil pensar en una pequeña vida que no ha tenido la oportunidad de desarrollar su vida.
Ahora los habitantes de Phoenix, USA, están horrorizados al saber que una madre ha asesinado a sus tres hijos.
Una madre de 22 años tenía tres hijos, un niño y dos niñas.
Desde fuera, la mujer de 22 años parecía una madre cualquiera.
Pero su interior era un total caos.
En un repentino ataque – estranguló a su hijo de tres años
Según el periódico británico Metro, la madre estaba cambiando la ropa de su hijo de 3 años cuando de repente todo cambió.
Según fuentes, ella arrojó brutalmente a su hijo al suelo con las piernas.
Y en un segundo colocó su mano sobre la nariz y la boca del niño mientras lo mecía cantándole una nana en su regazo.
Pero el niño no iba a abandonar sin luchar.
Trató de arañar a su madre para soltarse.
Fue inútil. Tras una larga lucha, el pequeño dio su último suspiro.
En la casa quedaban todavía sus dos hijas.
Alimenta a su hija de siete meses, luego alinea a sus tres hijos muertos
Sin piedad los otros bebés se encontraron con el mismo destino. La hija de siete meses fue estrangulada en su cama, tras ser alimentada por su madre.
Muy pronto los tres niños estaban muertos y según fuentes policiales, la madre los alineó en el sofá, uno al lado del otro, como si durmieran profundamente.
Un pariente que visitaba la casa llamó a la policía.
Ahora la madre de 22 años ha sido acusada de homicidio.
Esto me hace tremendamente daño. Me destroza solo el pensar que estos niños ya no podrán disfrutar de la vida que tenían por delante y que de una manera brutal, se la han arrebatado. Queridos niños, descansad en paz.
