La sopa de papa casera de la abuela ha sido un elemento básico en innumerables hogares durante décadas.
Pero con la llegada de nuevas recetas similares como la sopa de papa con tocino y la sopa de papa al horno, la receta ha pasado de moda.
Esta sencilla receta requiere solo unos pocos ingredientes y, sin embargo, sabe deliciosa como si se hubiera dedicado mucho más esfuerzo. Es la perfecta comida para un día frío y si no te sientes bien al 100 por cien.
Y es tan versátil que puedes añadir algo de jamón, tocino, o queso si tienes en casa.
Aprende a hacer esta sencilla pero completa receta y no te olvides de COMPARTIRLA con todos los amantes de la sopa, te lo van a agradecer.
Ingredientes
- 1 kilo de papas, peladas y cortadas en trozos grandes
- 1/2 taza de cebolla picada
- 1/2 taza de apio picado
- 3 cucharadas de harina
- Sal y pimienta al gusto
- 1/4 a 1/2 taza de mantequilla salada
- Leche evaporada
¿Cómo se hace?
- Pela y corta las papas en trozos grandes. Pica la cebolla y el apio, luego mezcla papas y las cebollas con la harina. Sazona con sal y pimienta y reserva.
- Derrite la mantequilla en una sopera. Puedes utilizar de 3 a 4 cucharadas de mantequilla, pero puedes usar menos si quieres reducir el contenido de grasa. Agrega la mezcla de papas a la sopera; Revuelve todo con la mantequilla derretida y agrega suficiente agua para cubrir las papas. La mezcla tiene que empezar a cocer.
- Añade la leche evaporada y espera a que hierva, reduce a fuego lento y déjalo cocinar, sin tapar, dándole vueltas de vez en cuando entre 25 a 30 minutos, o hasta que las papas estén tiernas.
Y si quieres puedes añadir queso, bacon, o tus hierbas favoritas. ¡Y luego disfrútala!
Esta receta se parece a la de mi madre.
No usaba harina ni apio, sino zanahorias ralladas y mucha pimienta negra sobre todo cuando estábamos resfriados.
Entre las cebollas y la pimienta nuestros resfriados solían desaparecer.
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