Las moscas del venado, también conocidas Lipoptena cervi, se están haciendo cada vez más comunes. y ya no son solo los venados las víctimas de estos insectos si no también lo empiezan a sufrir las personas. Son muchas las que comienzan a verse afectadas por estas pequeñas moscas que buscan el calor en la piel y el cabello de las personas y allí se sienten como en casa, chupando sangre y multiplicándose.
– Tienen una reproducción especial, comenta Didrik Vanhoenacker, biólogo en activo del Museo de Historia Natural, a GP.
Si notas que te pica o te escuece en el cuero cabelludo pueden ser las moscas del venado que están dispuestas a invernar.
La mosca tiene un pincho succionador con diminutos y afilados dientes que pueden hacer agujeros en la piel de los animales y las personas para conseguir succionar la sangre.
– Se reproducen fácilmente. La hembra no pone huevos, pero está embarazada y da a luz a una larva. Esta larva recibe alimento de una glándula dentro de la hembra, como si fuera un útero. Cuando la larva madura comenzará a convertirse en pupa y se queda en ese estado hasta agosto», informa Didrik Vanhoenacker, biólogo del Museo de Historia Natural del GP.