Durante miles de años el ajo se ha utilizado como un popular medicamento medicinal. Pero hoy en día incluso el ajo tiene secretos que muchas personas desconocen.
¿Sabías, por ejemplo, que nunca deberías tirar lo que se conoce como ajo germinado? Es decir, cuando están creciéndole tallos.
Y hay una razón para ello.
Seguro que reconoces la situación. Estas cocinando y de repente quieres añadir un diente de ajo para mejorar los sabores y te giras para buscar uno… pero te das cuenta de que el ajo es cualquier cosa menos atrayente. Esta viejo, seco, tiene varias raíces creciendo y, qué solemos hacer, tirarlo directamente a la basura.
Pero a pesar de que sea algo que muchos seguramente hacen o han hecho, en realidad es una muy mala idea tirar un ajo al que le está creciendo tallos.
Y ahora te voy a explicar el motivo.
Seguramente a nadie se le ha escapado que el ajo tiene muchos efectos positivos para la salud. Muchos estudios han demostrado que el ajo es bueno para el corazón, contiene antioxidante que fortalece el sistema inmunológico y, entre otras ventajas, puede incluso bajar el colesterol, la presión arterial y mejorar nuestra salud.
Ahora, un equipo de investigación de la Universidad de Kyungpook, en Corea del Sur, presenta nuevos hallazgos interesantes. Habían notado que prácticamente todas las investigaciones sobre el ajo se hacían con ajos frescos, pero ellos querían investigar los efectos que se producen al comer un ajo que crece. Como ya se sabe de antes, muchas semillas pueden tener un contenido nutricional más rico y son más fáciles de absorber por nuestros cuerpos, ¿podría ocurrir lo mismo en el ajo?
El resultado de las observaciones se mostró en la revista de química agrícola y alimentaria, del año 2014… La respuesta ha hecho que mucha gente reflexione al respecto.
La investigación demostraba que el ajo germinado, al que le crecen tallos, tiene significativamente más cantidad de antioxidantes útiles. Y cuando el ajo además tiene brotes verdes durante cinco días, los niveles aumentan drásticamente.
Esto supone a su vez que los beneficiosos componentes del ajo se absorben más fácilmente en el cuerpo.
Hasta ahora se trata solamente de observaciones por lo que no necesitas dejar totalmente de comer ajo normal. Pero como ves hay un claro motivo para no tirar el ajo con brotes. ¡Ponlo en la comida de vez en cuando y tu cuerpo te lo agradecerá!
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