Todos tenemos malos momentos. Momentos en los que nos sentimos desanimados, tristes… Pero solo se trata de ciertos momentos… ¿O no?
Si la sensación de tristeza y desánimo se prolonga en el tiempo, y surgen otros síntomas, entonces quizá no estemos hablando de un mal día, quizá estemos hablando de algo mucho más serio que necesita una solución.
Podemos padecer depresión y no darnos cuenta. Si reconoces los siguientes síntomas, entonces ha llegado la hora de actuar.
Se ha convertido en una de las enfermedades más comunes en el mundo, pero parece que seguimos sin darle la importancia que tiene por ser una «enfermedad emocional». Pero si las emociones no son importantes en la vida ¿entonces qué es importante?
De nada sirve tener una salud de hierro, una familia estupenda, un trabajo fabuloso o una casa preciosa si no lo podemos disfrutar.
Todos nos sentimos tristes, melancólicos, infelices o desanimados en un momento u otro de la vida. Pero cuando esto se prolonga durante varias semanas e interfiere en nuestra vida cotidiana, entonces podemos estar hablando de depresión clínica un trastorno del estado anímico que nos produce sentimientos de tristeza, pérdida, ira o frustración prolongados que afecta a nuestra vida de manera negativa.
Síntomas de la depresión
Si reconoces estos síntomas en alguien cercano o en ti mismo, entonces ha llegado la hora de actuar. No, no solo estás triste, o tienes un periodo bajo de ánimo. Se trata de algo más serio que se puede tratar y superar, pero para eso primero hay que reconocerlo. ¡Que no pase desapercibido para nadie!
1. Estado de ánimo irritable o bajo la mayor parte del tiempo
En muchos momentos podemos sentir que ciertas cosas nos irritan o que nos sentimos bajos de ánimo, pero si esto se prolonga durante semanas y se convierte en nuestro estado de ánimo habitual, entonces puede ser una señal de alarma de que puede tratarse de depresión.
2. Dificultad para conciliar el sueño o exceso de sueño
¿Quién no ha tenido algún asunto en mente que le ha quitado el sueño? Que ocurra alguna vez es normal, pero si tienes problemas para dormir, o todo lo contrario, duermes todo el tiempo, entonces quizá sea señal de alarma de que algo va mal. Esto unido al resto de síntomas de esta lista puede significar que padecemos depresión.
3. Cansancio y falta de energía
Te sientes cansado sin haber hecho grandes esfuerzos o llevar una vida especialmente ajetreada. No le encuentras explicación a ese cansancio, puede que la explicación sea más emocional que física.
4. Aumento o pérdida de apetito
Igual que ocurre con el sueño, el apetito se puede disparar o desaparecer cuando no nos sentimos emocionalmente bien. Nos damos atracones de comida para calmar la ansiedad, o todo lo contrario, no queremos probar bocado, porque la tristeza nos ha hecho un nudo en el estómago. De nuevo, si se trata de algo puntual, no hay que alarmarse, pero si se convierte en una constante en nuestra vida, debería hacer saltar las alarmas.
5. Sentimientos de culpabilidad, inutilidad y de despreciarse a uno mismo
Sentirse culpable, inútil, que no sirves para nada y te desprecias a ti mismo, ¿te suena? No, no es que seas un inútil ni que tengas la culpa de todo, no eres un ser despreciable, solo es que no te encuentras bien y necesitas ayuda para salir de ese pozo negro.
6. Dificultad para concentrarse
Estado de ánimo bajo, desánimo, cansancio, falta de sueño… Es casi inevitable que todo eso desemboque en una acusada falta de concentración. Afecta al trabajo y quizá te haga olvidar cosas importantes, y además nos enfrentamos a la incomprensión de los que nos rodean que no entienden nuestras lagunas. Por eso es importante un correcto diagnóstico y tratamiento, porque se puede tratar de depresión.
7. Inactividad y pérdida de placer por las actividades que nos solían gustar
De repente has perdido las ganas de hacer cosas, divertirte, practicar deporte, quedar con los amigos… Nada te motiva, incluso tus aficiones, esas actividades que solías practicar y disfrutar, han perdido su interés. Si has llegado a este punto, ha llegado el momento de consultar al médico.
8. Pensamientos repetitivos de muerte o suicidio
Te sobrevienen pensamiento catastróficos, enfermedades, accidentes… La sensación de que algo terrible va a ocurrir y va a acabar con tu vida. O peor aún, que uno quiere acabar con su propia vida. Definitivamente, esta es la señal que sí o sí nos tiene que hacer reaccionar.
Antes de dejarse llevar por esos negros pensamientos, hay que ponerse en manos de profesionales. Puede que no veamos la luz al final del túnel, que no hay razones por las que vivir, pero sí las hay, solo es que en ese momento no podemos verlas. Confía en los médicos, déjate ayudar por tu entorno cercano. Hay tratamientos que te puede hacer salir de ahí. Muchas personas han pasado por eso y lo han superado.
Si reconoces varios de estos síntomas, ha llegado la hora de pedir ayuda, porque estar deprimido no es ninguna tontería, y sí, hay solución, aunque en el momento parezca que no hay salida.
Lo más importante es reconocer que la enfermedad está ahí y tratarla como tal, por eso creo que es tan importante COMPARTIR este artículo. Quizá haya personas que estén deprimidas y no se den cuenta. Para ellos, para todos, ha llegado la hora de despertar, actuar y salir del sufrimiento.