Pregúntenle a cualquier pareja que haya envejecido junta, seguro que recuerdan dónde se conocieron.
Para Andy Fierlit y su esposa Donna fue en un baile de la iglesia en Pawtucker, Rhode Island, en 1960. Andy le pidió a Donna un chicle y el resto era historia.
La pareja se casó en 1966 y llegó a tener cuatro hijos. Esos cuatro niños a su vez les dieron 12 nietos.
Tristemente, a la edad de 45 años, Donna sufrió un aneurisma cerebral que la dejó parcialmente paralizada. Los médicos le dijeron a Andy que sería mejor dejarla en una residencia, pero Andy tenía otra idea…
Aunque Andy escuchó el consejo y recibió sugerencias para visitar algunas residencias locales, nunca olvidó la promesa que le hizo a Donna el día de su boda: «En la salud y en la enfermedad».
Donna ahora tiene 73 años y está en silla de ruedas, pero decir que ha tenido una vida aburrida y limitada no sería realmente cierto.
Gracias a que Andy la ama tanto como el día en que le pidió chicle, Donna ha estado haciendo algo extraordinario durante las últimas tres décadas.
«Les dije que viviríamos una vida normal», dijo Andy, cuando le preguntaron cómo había respondido a los médicos.
No estamos seguros de si se puede considerar ‘normal’, pero Andy y Donna ciertamente han disfrutado de una vida especial desde su aneurisma. Andy decidió que, en lugar de verla echada en la cama o en una habitación, la llevaría en un viaje por el mundo.
27 años y 20 países más tarde, todavía están en marcha.
Mira el video a continuación para ver las imágenes de la fascinante vida de Adam y Donna:
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¡Qué cuento realmente inspirador el de este hombre decidido a no dejar que las pruebas y problemas de la vida le superen!
Esto ciertamente reconfortó mi corazón. ¡Si te gusta, comparte el artículo para que todos tus amigos y familiares de Facebook puedan conocer esta fantástica historia!