Claudie Dubreuil trabaja en una empresa de construcción canadiense. A diaro ayuda a construir casas para otras personas, pero al mismo tiempo iba ideando en su cabeza su propia casa.
Quería construir la casa de sus sueños, y su idea ha demostrado ser bastante especial.
Un día fue al puerto de Montreal, donde vio unos contenedores abandonados.
Fue ese instante en el que la creatividad estalló y lo cambió todo.
Compró los contenedores – para construir su casa
Claudie decidió usar los contenedores para construir su propia casa.
Compró los contenedores y los llevó a un terreno que había adquirido previamente, y con los conocimientos que tenía de su trabajo, consiguió montarlos y comenzar a trabajar en la casa de sus sueños.
Por fuera le puso madera a los contenedores, algo importante para sobrevivir al frío invierno canadiense.
Antes de eso tuvo que eliminar todas las sustancias peligrosas que recubrían los contenedores de metal.
Y cuando esos pasos estuvieron hechos, Claudie comenzó a trabajar en el interior.
Gran resultado
Claudie puso grandes ventanales que le dieron al interior mucha luz y una vista maravillosa a la naturaleza.
Aunque la casa es bastante pequeña, la distribución en espacios abiertos y las grandes ventanas proporcionan la sensación de gran amplitud.
Claudie decoró su nueva casa con mucho gusto y el resultado fue sencillamente fantástico. Mi rincón favorito es la bañera al lado de la ventana. Imagínate tomarte un largo baño disfrutando de las vistas a la naturaleza.
https://www.youtube.com/watch?v=ZU08RIYaZBs&t=30s