Thomas Markle, el padre distanciado de Meghan Markle, lucha por su vida en un hospital de Filipinas tras sufrir una emergencia médica el 2 de diciembre de 2025.
El hombre, de 81 años, se ha convertido en una figura polémica desde que saltó a la fama como consecuencia de la relación (y posterior matrimonio) de su hija con el príncipe Harry.
Thomas y Meghan tuvieron una disputa muy pública antes de la boda real de Meghan en 2018. En ese momento, se reveló que Thomas había estado colaborando con fotógrafos que le pagaban por fotos que lo mostraban preparándose para la boda, según se informa, se le había dado órdenes estrictas de no hablar con la prensa.
Las consecuencias le llevaron a retirarse por completo de la boda de su hija, y fue el rey Carlos quien acompañó a Meghan al altar durante la ceremonia en Windsor. También se citaron problemas de salud como motivo de la ausencia de Thomas, ya que, según se informa, había sufrido dos infartos aproximadamente al mismo tiempo.
Ahora, según sus seres queridos, Thomas Markle está luchando por su vida.
Según su hijo, Thomas Markle Jr., el padre de Meghan enfermó gravemente en su casa hace una semana y necesitó atención médica inmediata y urgente. El miércoles 3 de diciembre fue sometido a una operación de tres horas y fue ingresado en la unidad de cuidados intensivos mientras los médicos se preparaban para extirparle un coágulo de sangre.
Thomas Jr. declaró al Daily Mail: «Llevé a mi padre a un hospital cercano a nuestra casa, donde le hicieron varias pruebas y los médicos dijeron que su vida corría peligro inminente».
Y continua: «Nos llevaron rápidamente en ambulancia, con las sirenas encendidas, a un hospital mucho más grande en el centro de la ciudad. Mi padre ha sido sometido a una operación de urgencia. Quiero pedir a todo el mundo que lo tenga presente en sus pensamientos».
Según la revista People, Thomas padre e hijo llevan viviendo en Filipinas desde principios de este año. El hijo reveló que el pie de su padre se había vuelto «azul y luego negro» el lunes pasado, antes de que los médicos determinaran que era necesaria la amputación.
«Mi único deseo es que Meghan muestre algo de compasión por mi padre. Está literalmente luchando por su vida», dijo Thomas Jr.
Tras muchas especulaciones en Internet, más tarde se confirmó que Meghan sí había contactado con su padre tras su operación de pierna.
«Puedo confirmar que ha contactado con su padre», declaró un portavoz de la duquesa de Sussex a PEOPLE.
El padre de Meghan ha hablado abiertamente de su dolor por la ruptura de la relación con su hija.
Cuando se le preguntó por su traslado a Filipinas, explicó que era para alejarse de los constantes recordatorios de su distanciamiento de su hija.
«Todos los días había alguna noticia sobre Meghan y Harry», declaró al Mail on Sunday a principios de este año.
«Era un recordatorio constante de que mi hija ya no me habla. Sigo sin entender por qué sigue ignorándome. Mi único deseo es ver a mis nietos antes de morir. Mi único deseo es ver a mis nietos antes de morir».
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