Era el día de la independencia americana, el 4 de julio, cuando una madre de Dallas paró en una gasolinera para echar gasolina.
En su vehículo estaban sentados sus dos hijos, de dos y cuatro años. Pero esta parada rutinaria iba a dar pronto un giro inesperado.
Eran las diez de la noche cuando la protagonista de esta historia paraba en una gasolinera para respotar con sus dos hijos. Cuando iba a entrar para pagar, vio que un desconocido entraba en su vehículo.
Al verlo, salió corriendo hacia su auto y se metió en el asientos traseros, donde estaban sus dos hijos, según informa Fox4.
Dispara al hombre en la cara
”Me metí en el asiento trasero y le pedí al hombre que parase y saliera. Pero el hombre se negaba a salir del vehículo. Él se dio la vuelta y me miró. Luego me estiré sobre el reposabrazos para llegar a la guantera y entonces le disparé, tras haber alcanzado mi arma de la guantera», cuenta esta madre a Fox4.
Ella contó que apretó directamente el gatillo, pero que su intención era dar un tiro al aire, pero acabó disparándole en la cara.
”No soy una asesina ni nada parecido. Pero creo en proteger lo mío», añade esta madre.
Después de recibir el disparo, el hombre estrelló el vehículo contra una valla en un restaurante McDonalds que había junto a la gasolinera. Consiguió salir del vehículo pero colapsó en la zona y fue detenido por la policía.
El hombre fue llevado al hospital pero no tenía lesiones que pusieran en peligro su vida, según informa KXAS-TV. Ahora puede ser acusado por robo de vehículo y secuestro de niños.
La mujer y sus hijos salieron sanos y salvos del incidente.
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