Puedes preguntar a cualquier padre y obtendrás la misma respuesta, uno de los momentos más importantes de la vida es cuando te enteras por primera vez de que vas a ser padre o madre.
Y justo ese inolvidable momento de alegría fue el que tuvieron Emily Chell y su prometido Wayne Barratt. La pareja sabía ya que quería pasar el resto de sus vidas juntos y cuando se enteraron de Emily estaba embarazada, no podían estar más emocionados.¡Un bebé iba añadirse a esta maravillosa aventura. Ampliar la familia era algo muy deseado!
El embarazo de Emily se desarrolló sin grandes complicaciones y ya se acercaba el día en que la futura mamá iba a dar a luz. Pero lo que nadie podía imaginar era que iba a ser un día muy dramático.
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Emily Chell y Wayne Barratt apenas podían esperar a que llegara el gran momento y contaban los días para la llegada de este deseado bebé.
Solo había un mínima preocupación. Tres semanas antes del parto, la hermana de Emily se casaba- otro de los grandes momentos de la vida – y Emily no quería perdérselo por nada del mundo. Por suerte la boda y el alumbramiento iban a producirse con algunas semanas de diferencia y Emily cruzaba los dedos para que así fuera.
Pero la vida, como todos sabemos, es impredicible, y la noche antes de la boda, Emily rompió aguas.
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Emily, quien se encontraba en un hotel ayudando a preparar la boda junto a su hermana, tuvo que ser traslada de urgencias al hospital. Llegó a medianoche con una idea en la cabeza, que prácticamente era imposible: haría todo lo que estuviera en su mano para no perderse la boda de su hermana.
– «Los médicos me explicaron que si no había complicaciones, el bebé nacería sobre la 7 de la mañana. Con lo cual podríamos solucionarlo», dijo Emily a The Sun.
¡El parto fue muy bien y a las 07.10 de la mañana Emily y Wayne eran padres del pequeño Brody! Fue algo inolvidable – ahora faltaba conseguir el siguiente objetivo.
Posted by Emily Olivia Barratt on Thursday, June 14, 2018
Tras el parto, Emily y Brody tomaron un merecido descanso en el hospital. Y a las 4 horas, sobre las 11.15, estaban preparados. La familia salió corriendo del hospital, esperando llegar a tiempo a la iglesia.
¡Para sorpresa y admiración de todos, lo consiguieron!
– Me retrasé 10 minutos, pero la gente me esperó. Así que llegué al altar con Brody en mis brazos. Todos estaban muy emocionados. Fue un momento maravilloso, cuenta Emily a The Sun.
Esta recién estrenada mamá pudo, para más alegría, ser testigo de la novia, su hermana. Y además llevar en su regazo, en ese maravilloso momento, a su bebé recién nacido. ¡Todo un milagro!
– Emily hizo todo lo que pudo para llegar a tiempo a la boda. Ahora todos vamos a celebrar este maravilloso día con Brody, comenta la hermana de Emily, Katie a The Sun.
¡Qué increíble historia! ¡y qué alegría para Emely se convirtiese en madre primera vez y al mismo tiempo llegase a tiempo para disfrutar de la boda de su hermana, que no quería perderse. Y lo más importante ¡la familia se encuentra perfectamente, disfrutando de su deseado nuevo miembro! ¡Comparte si tú también quieres desearles mucha suerte a la familia!
