Michael, 13 años, abrió su propia panadería – y por cada pan que vende regala uno a alguien que vive en la calle

Michael C. Platt solo tenía 11 años cuando abrió su propia panadería, llamada Michale’s Desserts, en Washington D.C, Estados Unidos.

Pero no es una panadería normal. Es una panadería donde combina sus dos pasiones en la vida – la panadería y ayudar a las personas que realmente lo necesitan

Muchos dicen que quieren ayudar a los demás y que quieren hacer algo bueno para la sociedad. Pero no son muchos los que realmente lo hacen.

Pero uno que sí tiene un corazón de oro y realmente quiere ayudar es Michael, de13 años de edad.

Cuando él solo tenía 11 años abrió su propia panadería que tiene algo especial, porque por cada cupcake que vende, regala otro a alguien sin hogar y con hambre, según informa Washington Post.

La inspiración en ayudar a los demás le llegó a Michael gracias a Martin Luther King. Y cuando se le ocurrió la idea de su panadería sus padres lo apoyaron para que pudiera comenzar su negocio. Hoy en día la pastelería es capaz de financiarse a sí misma.

Michael vende unos 75 cupcakes al mes, cuatro por $15, y luego también vende galletas y otras cositas más. Esto también significa que tiene que hacer mucho más para regalar a la gente que no necesita, lo cual lo hace con mucho cariño.

“Yo siempre quise tener un propósito por lo que hago. Todo se trata de ayudar a las personas, no solo con un propósito para ti, sino pensando: ‘¿Esto cómo afecta a otras cosas?’”, dice Michael según Washington Post.

Michael también colabora con la organización No Kid Hungry (Ningún niño con hambre).

Michael es una inspiración y nos demuestra que nada es imposible, y que con la bondad y un buen corazón podemos llegar lejos. Si quieres puedes difundir la historia, así más pueden inspirarse por este jovencito.