Madre descubre ampollas sangrientas en la boca de su hijo de un año, el diagnóstico del médico la deja destrozada

El hijo de Samantha Rodger tenía sólo 1 año cuando ésta notó unos bultos rojos y ampollas en su boca.

Inmediatamente lo llevó al médico, que le diagnosticó una gripe. Los médicos trataron de tranquilizar a Samantha diciéndole que en el peor caso se trataba de fiebre aftosa humana, que suele curarse en una semana.

Sin embargo, durante los siguientes días las ampollas fueron a peor, crecían y se extendían por su cuello y estómago.

Juliano sufría mucho dolor y Samantha estaba extremadamente preocupada.

Corrió de nuevo al hospital donde le hicieron varias pruebas.

 

The boy’s mother is warning other parents to be careful when letting people hold their babies>>>…

Posted by KFVS-TV on Sunday, July 30, 2017

Finalmente, los médicos decidieron hacer a Juliano una prueba del herpes tipo 1 (HSV) reporta , Liftable. Para desmayo de Samantha las pruebas resultaron positivas.

Samantha no tenía ni idea de cómo su hijo pudo contagiarse con el virus. Ella no sabe quién de sus conocidos lo tiene. Un simple abrazo o beso podría haber sido el responsable del contagio de Juliano.

«Es un fastidio, porque es un problema para toda la vida ahora», cuenta a Liftable. «No se cómo manejar esto. Estoy haciéndolo lo mejor que puedo. Me rompe el corazón y no puedo hacer nada para ayudarle».

Muy contagioso

El herpes es muy contagioso y puede transmitir por contacto con la piel, saliva o tocando objetos infectados con el virus. Los bebés están en particular riesgo, ya que su sistema inmune todavía no está totalmente desarrollado.

Desafortunadamente no hay cura para el herpes. Ahora Samantha quiere advertir a otros padres para que sean extremadamente cuidadosos con las personas que entran en contacto con su hijo.

«Todo lo que puedo decir es que sean cautelosos. Puede ser cualquiera, tu mejor amigo, tu hermana, tu hermano o tu madre», dice. «Si ves que tienen un herpes labial simplemente no les deje acercarse a su bebé».

Lavarse las manos frecuentemente y cuidadosamente puede también ayudar a prevenir el contagio del virus.

En el clip de abajo puedes ver imágenes de lo mucho que afectó este virus a Juliano:

Mi corazón se rompió viendo las fotos de Juliano, pobrecito.  Aunque no hay cura para el herpes, las personas infectadas con el virus no siempre sufren erupciones. Potencialmente, Juliano podría no sufrir nunca más una erupción como esta en toda su vida. Espero eso por el bien de este pequeñín. Por favor, conciencia a los demás sobre la importancia de lavarse las manos y desinfectar objetos que entran en contacto con bebés compartiendo esta historia en Facebook.