Pasar por el supermercado de camino a casa del trabajo debe ser la cosa más normal del mundo.
Entrar rápidamente y comprar el último ingrediente que nos hace falta para la cena, no es nada extraño, siempre que el aparcamiento sea gratis fuera de la tienda, claro.
Que vayas unos minutos a comprar una cosa y de repente al salir de la tienda veas una multa en el parabrisas, te va a enojar muchísimo.
Tratar de luchar por una multa de estacionamiento casi nunca tiene éxito, pero una mujer estadounidense lo logró.
Tratar de que te quiten una multa de aparcamiento es casi imposible y por lo tanto es mejor ni pensar en intentarlo, porque nunca logras salir victorioso. Pero en EEU es un poco diferente, porque una mujer de Rhode Island pudo vivir la experiencia.
Dos minutos por mal aparcamiento
A una mujer le pusieron una multa porque había aparcado a las 21.58 en un lugar que era gratis pero a partir de las 22:00.
La multa le irritó a la mujer de tal manera que eligió demandar en un juzgado local. Y dijo que su reloj marcaba las 22:00 en punto cuando ella fue a aparcar su automóvil.
En un vídeo que se ha difundido por la red, el juez puede ver el suceso de primera mano y apenas puede evitar echarse a reír.
Pedir pena de cárcel
El juez, a quién naturalmente toda la situación le resulta muy cómica, decide bromear un poco.
Un delito es un delito, afirma el juez y pedir la prisión es una pena razonable.
La mujer que se dio cuenta de que el juez estaba bromeando con ella, a penas podía controlarse y al final soltó una carcajada.
El juez obviamente anula la multa.
Mira el siguiente vídeo sobre el suceso:
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